La planta artificial de orquídeas de Bloomingville es el epítome de la belleza atemporal. Sus flores blancas y elegantes se extienden hacia arriba, creando un aspecto clásico y moderno al mismo tiempo. La orquídea está libre de mantenimiento, lo que le permite disfrutar de su encanto floreciente sin preocupaciones sobre el riego o el cuidado. Entregado con una olla simple, está listo para colocarse en una maceta que complementa tanto la planta como su decoración. Forma los tallos/ramas antes de usar para sacar la apariencia natural de la planta y adaptarlo a su decoración personal.