El té es una forma abstracta, un objeto de impresión casi artesanal que parece representar dos manos sosteniendo una luz entre sus palmas y solucionando solo vigas irregulares que crean un efecto de claroscuro, como proyectando sombras en la pared. Particularmente innovador es la sensación irregular y porosa elegida para el acabado extremadamente natural, casi como el de terracota o galleta cerámica. Una variedad de colores básicos también nos ayuda a comprender que los objetos de calidad excepcional y una excelente poesía se pueden crear incluso a partir de materiales reciclados. El té está hecho de tecnopolímero termoplástico reciclado y viene en blanco, antracita, terracota y gris-marrón.