El jarrón de deco bericano en terracota con un áspero esmalte blanco se convierte rápidamente en el centro de atención. La silhueta discreta de una cara te atrae y su altura audaz de 40 cm la convierte en una verdadera pieza central que se puede colocar solo en el piso o en un alféizar de ventanas en una hermosa vida muerta nórdica.